lunes, junio 11, 2007

Y hasta en la Cuarta Salio el Megarector

Estudiantes de la Universidad de Valparaíso se mandaron protesta de lujo... ¡Así da gusto!
"Rectorazo" es como don pino
Hasta la tusa con los camotazos y las "molo", mateos de Arquitectura animaron carnaval en contra de autoridad del plantel, Juan Riquelme.

Como una forma de cambiar el estigma de violencia que tienen las movilizaciones estudiantiles, los mateos de la Universidad de Valparaíso protestaron en contra de su rector, Juan Riquelme Zucchet, y nuevamente dieron a conocer las demandas por las que ya llevan tres semanas en toma.

"La idea fue hacer algo que tuviera impacto urbano y que realmente llamara la atención de la comunidad. Entonces se nos ocurrió, por lo de la Pequeña Gigante, fabricar el Pequeño Rector, que andaría en las calles en busca del sobre azul", dijo Francisco Jara, uno de los creadores del mono.

De siete metros de altura, el gigante (que quedó igualito a Don Pino) es sostenido por una estructura de madera, pero el resto está confeccionado con material reciclado, como papeles y cartones. Su construcción fue realizada en el tiempo récord de tres días y dos noches, y en ella participó toda la Facultad de Arquitectura.

"Claro que esta cosa no tiene articulaciones ni cierra el ojo como la Pequeña Gigante. Ésta es una versión más artesa, pero que igual impacta", agregó el padre del gigante.

La semana pasada la monumental estructura se paseó por las calles de Valparaíso y llegó hasta el Congreso Nacional, en el marco de una pacífica marcha que congregó a miles de chascones.

Esta vez, la idea fue sensibilizar a los viñamarinos. Desde el mediodía la caricaturización del rector de la universidad porteña recorrió el borde costero de Reñaca para llegar a 15 Norte, a la altura de la rotonda San Martín, de Viña del Mar.

La versión del rector Riquelme Zucchet no estaba sola: El comando de seguridad estudiantil lo escoltaba, ironizando el supuesto maltrato de los Carabineros con los estudiantes.

Por si fuera poco también apareció una versión más pequeña de la autoridad, pero con los pantalones abajo. "Es el liberador de tensiones", explicaron los estudiantes que le pateaban el poto.